28 de noviembre de 1979 es una obra que se realizó en el marco de ejercicios elaborados por el TAV en relación con los crímenes acontecidos en dictadura, centrándose fundamentalmente en los detenidos desaparecidos. Sin derivar la propuesta a un ejercicio contenidista o de propaganda (lo cual era absolutamente imposible para el período), la artista elige realizar una obra que retrate un día de su vida. Lo anterior, como un ejercicio para poner de manifiesto el tiempo determinado de un individuo, de subvertir el discurso respecto al tiempo tradicional y verterlo sobre un soporte material, en la evidencia constante del paso de un persona, donde lo único que no está presente es la persona misma.
Es así como, en un cuaderno fotocopiado de 21×16 cm, registra la rutina radical de una madre joven que tiene que cuidar a hijos pequeños, donde el tiempo para dedicarse a su propia producción es absolutamente inexistente. 28 de noviembre de 1979 dispone de una rearticulación del lenguaje para elaborar una obra que aprovecha las condiciones objetivas de su contexto para poner de manifiesto una condición de exclusión, relegamiento y repliegue de su labor, pero que, sin embargo, son claves en la potencia discursiva de una obra trascendente.
Matías Allende, Catálogo Razonado MAC, 2017.